Hola Paqui 😉
La baba de caracol funciona genial en arrugas y flaccidez…el veneno de serpiente lo mismo pero más con efecto bótox porque es una toxina que actúa parecido pero sin ser inyectada claro.
No vale cualquier baba de caracol….me refiero que no es coger un caracol y que te pasee por la cara (que asquito por dios, te imaginas? jajajajaja)….la baba de caracol es la baba de caracol en celo, esa es la que vale….si el caracol que por cierto ya sabes que los caracoles son hermafroditas, o sea, machos y hembras al mismo tiempo…..Bueno pues que no es baba de caracol sin más, es baba de caracol cachondo por decirlo de manera simpática jajajajajaja
Si supieras amiga que los caracoles me dan tanto asquito, en mi zona los hay a toneladas, que jamás he podido usar una crema de baba de caracol ni he comprado el principio puro de ninguna manera porque es que sé que me voy a aplicar la crema con una cara de asco que no sé si voy a poder! soy muy escrupulosa con el tema de los caracoles y otros bichejos…..y vivo en el campo! en épocas de lluvias sales de casa y vas pisando caracoles que es una locura y con cada pisada mi cara de asco porque es que no puedo con ellos! y las tremendas babosas que hay aquí en el norte que hasta que no vine a vivir aquí, jamás antes las había visto tan grandes! son monstruosas de enormes! y más asquerosas aún que los caracoles que al menos llevan parte tapada con la concha!
No sé si algún día tendré valor de aplicarme una crema de baba de caracol……Está demostrada su eficacia cosmética pero me puede más el escrúpulo caracolil 😉
Las mejores marcas son las coreanas que suelen llevar más cantidad de estos principios…usan porcentajes más altos que el resto de cosméticos.
De la marca Mizon que está posteada la crema hidratante de hialurónico que es tan bueno, tienen también la de baba de caracol.
En los últimos años también se está usando el veneno de abeja….la llamada apiterapia que ofrece también excelentes resultados pero que aún resulta cara….el principio activo puro sale carísimo…..aún hay que esperar a que lo abaraten un poco porque sólo está al alcance de bolsillos muy solventes.